Emociones: conocer, sentir, expresar
Mi perspectiva se centra en comprender y abordar las emociones de manera integrada, especialmente cuando se trata de emociones desagradables.
Es esencial ver que las emociones no deben ser gestionadas por sí solas, sino que la clave está en: comprender las reacciones que acompañan a estas emociones y trabajar en su expresión saludable en un contexto específico. En otras palabras, diría que:
No queremos gestionar las emociones, queremos gestionar algunas de las las reacciones que tenemos ante emociones desagradables.
Las emociones humanas son un fenómeno interno universal que, al mismo tiempo, es social y cultural.
¿Dónde están las emociones?
Las emociones se manifiestan (las puedes sentir) en diversas dimensiones, ámbitos o lugares:
- Las dimensiones más internas, como la física, la cognitiva y la metacognitiva,
y también,
- Las más visibles o las que nos conectan con el otro: las dimensiones conductual y relacional.
La percepción de la intensidad es una parte crucial de esta experiencia emocional, ya que influye en cómo vivimos e interpretamos la vida.
Y vamos a lo práctico: ¿Qué hacemos con tanta emoción?
Conocer, sentir, expresar.
Emociones y yo:
La primera etapa, conocer
Implica una exploración consciente de nuestras propias emociones. Esta autoconciencia implica la capacidad de reconocer e identificar las emociones que experimentamos en diferentes situaciones y también, en un nivel más profundo y clave: entender su significado y funciones.
Segunda y contínua: el proceso de sentir,
Se conecta la consciencia con el organismo, para seguir con la comprensión más profunda de nuestras emociones.
Aquí, la conciencia de las sensaciones físicas asociadas a las emociones, así como su intensidad, es clave.
Sentir las emociones no solo significa reconocerlas mentalmente o poderlas explicar, sino también experimentarlas a nivel profundo.
Emociones y otros: expresar.
La fase de expresar,
Implica encontrar maneras saludables de expresar nuestras emociones con nosotros mismos y con los demás. Esto puede incluir el uso de palabras, la expresión artística u otras formas de comunicación.
La expresión emocional saludable no solo es recomendable para liberar las emociones para una misma, lo que ya implica bienestar, sino que también es útil para establecer una conexión con los demás, fomentando la comunicación efectiva para la comprensión.
La expresión forma parte a la vez de un proceso clave, que también es continuo: la prevención de brotes, explosiones, conflictos u otros problemas desencadenados por las reacciones desagradables.
Un ejemplo: si una persona hace deporte golpeando un saco, quizá previene explosiones de rabia con sus seres queridos.
Este proceso de conocer, sentir, expresar no es lineal; es un círculo constante de aprendizaje y crecimiento a medida que tu vida va pasando.
Ya sabes, aprendizaje infinito.
La autoexploración emocional continuada permite profundizar en la comprensión de las propias reacciones.
Sentirse cómoda con esta exploración interna abre la puerta a una conexión emocional más auténtica.
La importancia del contexto
Me gusta especialmente concebir las emociones como un
fenómeno interno universal y, al mismo tiempo, como un fenómeno social y
cultural.
La manera en que experimentamos una emoción no se limita
solo a nuestra experiencia interna, sino que también se ve afectada por el
contexto cultural en el que vivimos.
Las emociones están directamente vinculadas con los juicios
morales, ya que se relacionan con la interiorización de los valores y normas
sociales que configuran la cultura de la persona. Por ejemplo, el sentimiento
de rabia puede ser complejo, ya que implica un juicio sobre una injusticia
recibida, que a su vez implica un significado compartido culturalmente sobre lo que es bueno-justo o malo-injusto.
Considero que es valuoso enfatizar la idiosincrasia cultural, ya que hay una gran riqueza de matices en las emociones vividas en cada cultura y lengua en que se expresan.
Visto así, se podría decir que las emociones son, en gran
parte, indefinidas, ya que las culturas se modifican, cambian, enriquecen y amplían sus normas y valores constantemente a lo largo de la historia.
Por lo tanto, la experiencia emocional de un individuo está marcada de manera significativa por la relación con los otros.
En un nivel más autobiográfico, si no se han presenciado modelos de resolución de conflictos y manejo de la frustración saludables en el primer sistema social (habitualmente la familia) tendrán que aprenderse en la edad adulta.
Nunca es tarde para mejorar la identificación de las propias emociones, la paciencia, la escucha y la comunicación con una misma y el resto de mundo.
Este proceso de aprendizaje puede ser una oportunidad para construir una comprensión más profunda de las emociones humanas, de las propias y las ajenas,
No nos podemos escapar de las emociones, pero podemos aprender a que nuestras reacciones desagradables sean más manejables.
En este camino de conocer y sentir las emociones humanas, recuerdo la importancia del acompañamiento terapéutico.
Un espacio seguro y acogedor puede ser fundamental para ayudar a explorar, conocer, sentir y expresar las emociones de manera más completa.
Y recuerda: estoy aquí para acompañarte.
Preguntas Frecuentes
Rellena el formulario con tu problemática y me pondré en contacto contigo para acordar el día y hora de la primera sesión gratuita por teléfono.
Una visión integradora. Es decir, un modelo de psicoterapia que adopta teorías o postulados de más de un modelo.
Se pretende aprovechar la rica diversidad actual y la variedad de perspectivas existentes.
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La sesión informativa es telefónica y tiene una duración de 20 minutos.
Las sesiones de psicoterapia tienen una duración de 1 hora, online o presencial.
Es difícil de concretar ya que depende de la persona y del grado de interferencia en el bienestar.
Se suelen notar mejoras o cambios significativos hacia la cuarta o quinta sesión. Esto no significa que sea suficiente y no siempre ocurre. Después de seis o siete sesiones se realiza una evaluación para valorar cómo evoluciona el plan de acción diseñado.
Dependiendo de la problemática puede alargarse o establecer puntos de partida para otros procesos.
Anna Campos Tomàs.
Psicóloga y psicoterapeuta.
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