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Sobre la alianza terapéutica.

Rara es la relación psicoterapéutica. 

Rara por especial. 

Un vínculo concreto 

y exclusivamente 

terapéutico.

No se trata de una amistad ni en una versión mejorada de tu pareja. 

Aún así necesita cercanía. 

 

Tanta que implique lo esencial: 

la creación conjunta de un nivel de confianza y conexión. 

Una alianza. 

Cuando sientes que tu psicoterapeuta «te cae mal», puede ser un indicador de que la alianza está tambaleando.

Para que una terapia sea efectiva, debes sentirte lo suficientemente confortable como para abrirte y compartir tus pensamientos, emociones y experiencias más íntimas.

Si no confías en tu terapeuta, 

es probable que no puedas abrirte.

Si tambalea la confianza, adiós.

Pero no es irrecuperable.

Como siempre, hay que hablarlo.

Entonces, ¿qué haces si sientes que tu psicoterapeuta te cae mal?

Primero, comunica tus sentimientos con honestidad.

Una buena psico estará dispuesta a hablar de cualquier problema que surja en la terapia.

Además, recuerda que es habitual que al principio sientas cierta resistencia, resquemor, incomodidad, malestar, rechazo y otras mil sensaciones.

Y todo esto puede ser parte del proceso.

La alianza terapéutica no se trata de caerse bien o no, sino de confiar en que tu psico tiene las habilidades necesarias para ayudarte a mejorar tu vida.

Es como un cóctel de confianza, profesionalismo y empatía.

Así que, la próxima vez que te encuentres diciendo «mi psicoterapeuta me cae mal,» 

tómatelo como una oportunidad para explorar más profundamente tu relación terapéutica.

Y si te cae muy, muy mal. 

Quizá es que no se adecua a ti.

A veces curar las heridas genera escozor, picor, dolor o sufrimiento. Aunque duela lo aguantamos ya que entendemos que forma parte del proceso de curación. 

Es una de las etapas por las que pueden pasan también los procesos de curación de heridas emocionales.  De una manera más invisible, también pueden conllevar momentos de tensión o malestar.

Nos sentamos y conversamos durante una hora. Semanal o quincenalmente.

La observación y análisis de los diferentes niveles de la persona se realiza de manera integrada: funcionamiento físico, mental, emocional, relacional, social y automático o inconsciente.

La persona tiene un rol activo durante todo el proceso. Es esencial la motivación hacia el proceso psicoterapéutico. 

La etapa adulta está marcada por grandes retos que pueden generar situaciones o épocas difíciles de sostener y que nos generan conflictos, problemas y sufrimiento.

Los motivos para solicitar atención psicológica pueden ser muy variados. 

Aquí puedes leer más sobre algunas de las problemáticas frecuentes.

Ilustraciones generadas con mi amiga IA que entiende genial los sueños en blanco y negro con toques rosa.

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